Fuente: http://bit.ly/UrllyW |
El ejemplo más claro y reciente
es la conocida como “La primavera árabe”.
Una serie de levantamientos que se produjeron en algunos países del mundo árabe
con el fin de cambiar la situación político-social. La primera chispa de este
fuego se gestó en el seno de las redes sociales. En este marco fue donde los
usuarios iniciaron su lucha contra ese descontento generalizado.
Un hecho que parece haber
transcendido más allá de su momento temporal. Por lo menos, esa es mi opinión
tras conocer que algunos gobiernos han aumentado su control sobre las redes
sociales. Por todos es sabido, que países autoritarios como China, Cuba, Rusia
o Venezuela intentan controlar contenidos y páginas de Internet, pero tras los
acontecimientos citados, la situación se ha extendido a otras naciones. Desde
mi punto de vista, muchos gobiernos del mundo árabe han sentido miedo a una
nueva represión social, al comprobar la capacidad de organización que permiten
estas redes sociales.
Por ello, no resulta extraño escuchar
noticias como que: Irán
diseña un programa inteligente para controlar este tipo de redes. El general
Esmail Ahmadi Moghadam, según citas publicadas en la prensa iraní, explicó que “el nuevo software evitará que los iraníes estén expuestos a contenidos maliciosos en línea, al tiempo que permitirá a los usuarios disfrutar de los beneficios de internet”.
En cambio otros, están aprovechando
al límite las posibilidades que brindan estas herramientas. Incluso me
atrevería a decir que el uso que hacen de ellas es abusivo. Me refiero a la
nueva vía que han encontrado los empresarios para buscar referencias de un potencial
empleado.
Por supuesto que redes
específicas para el ámbito laboral como Xing o Linkendin me parecen muy
adecuadas y recomendables, pero no son estas a las que me refiero. Hace meses
que todos hemos escuchado que las empresas miran los perfiles de Facebook de
sus candidatos antes de contratarlos. Por esta razón, se recomienda cerrar el
acceso a nuestro perfil.
Fuente:http://bit.ly/RBYsKy |
De hecho, en otros países como
Estados Unidos se ha extendido tanto esta práctica que es habitual que el
empleador pida las claves para acceder a la cuenta. Un tema que ha despertado muchas críticas entre los ciudadanos y algunos
estados, como el de Ilinois o California, ya han promulgado leyes específicas
de protección de datos para estos casos.
A pesar de que es una práctica cada vez más empleada, quizás sería más ético y correcto preguntar directamente a la persona aquello que le preocupa o inquieta al empresario. ¿Qué pensáis vosotros? Comunícate con Lara os invita a que opinéis sobre este asunto que toca tan de cerca a todos lo que están buscando trabajo.
A pesar de que es una práctica cada vez más empleada, quizás sería más ético y correcto preguntar directamente a la persona aquello que le preocupa o inquieta al empresario. ¿Qué pensáis vosotros? Comunícate con Lara os invita a que opinéis sobre este asunto que toca tan de cerca a todos lo que están buscando trabajo.
No entiendo nada. El mundo está loco, ¿se le pueden poner puertas al campo?, pues eso.
ResponderEliminarSobre el tema del empleador, ¡¡Eso es América¡¡ otra cosa ilógica para añadir a tu artículo del día cuatro. ¿Daríamos la cta. del banco? Anda, que alguno tiene las neuronas desenchufadas.
Un abrazo.
mechiflaelcine.blogspot.com.es/
Estoy de acuerdo contigo Merche no se le pueden poner puertas al campo. Y el mundo está totalmente loco. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a dar para encontrar un trabajo?
EliminarUn saludo.